Siempre que necesites enviar una producto al que no pueda darle el sol o simplemente que no quieres que se sepa lo que está en la bolsa, no dudes es usar bolsas de mensajería anónimas.
Con este tipo de bolsas nadie podrá ver su interior, asegurando así su intimidad. Estas bolsas permiten al receptor tener la seguridad de que no se ha manipulado y que no se ha visto.